Otro de nuestros patrocinadores: Centro Hípico El Cerrado de los Frailes

Hoy sigo presentándoos a nuestros patrocinadores, hoy le toca al Centro Hípico El Cerrado de los Frailes. Sólo puedo decir cosas buenas sobre ellos, ¡me encanta!

Los conocí hará unos tres meses y desde que mi marido y yo fuimos allí para disfrutar de un paseo a caballo por la Ribera del Ebro no he podido perder el contacto con ellos.

Están ubicados en Alagón, a unos 20 minutos de Zaragoza, en una finca preciosa, rodeada de campos y vegetación, a la orilla del rio. Los caballos viven allí como reyes, tienen unas cuadras espaciosas y pasan la mayoría del tiempo pastando en manada.

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Comencé en esto de la equitación hará menos de un año y se lo recomiendo a todo el mundo. Hace falta paciencia, pues no es fácil y siempre hay que tener en cuenta que estamos tratando con animales; pero aporta multitud de beneficios, lo único malo que se ocurre al respecto son las agujetas que tengo al día siguiente de haber montado (jeje).

Es algo muy relajante, que te ayuda a desconectar de todo lo demás ya que te hace estar concentrado al 100% en lo que estás haciendo (algo que aunque parezca fácil no lo es, pues tendemos a estar haciendo una cosa y estar pensando en otras diez a la vez).

Me parece también un deporte fantástico para los niños, que les hace estar en contacto con la naturaleza, a la vez que aprenden a respetar y cuidar a los animales y a desarrollar multitud de aptitudes.

También es recomendable para problemas tanto físicos como psicológicos, todo un lujo vamos.

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Parece que asociamos este deporte a “ricos” pero os aseguro que su coste es igual que cualquier otra actividad que podamos realizar, además existe opción de bonos de varias clases, clases sueltas…

En “El Cerrado de los Frailes” tienen muy en cuenta las necesidades y el desarrollo de cada uno, por eso siempre se comienza con clases particulares. Hasta que no estamos preparados para pasar a las clases grupales no lo hacemos, es cierto que en otros lugares nos ponen en clases grupales desde el primer momento, y os aseguro que el aprendizaje es muchísimo más lento.

La metodología de las clases es diferente, y te hace desarrollar una confianza que no puedes desarrollar de otro modo (una de mis últimas hazañas ha sido trotar sin manos y sin silla, o darme la vuelta encima del caballo mientras va al paso).

También disponen de servicio de pupilaje de caballos, opción de compartir caballo…

De corazón os invito a conocerlos y visitarlos, veréis como os conquistan. Podéis encontrar más información en www.elcerradodelosfrailes.com

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